En algún
rincón del mundo está soplando un viento que juega armónicamente con la
naturaleza. Mientras que yo, aquí sentado frente a la mesa, me hago la misma pregunta que alguna vez Ian Curtis
escribiera:
“Entonces, ¿esto es permanencia... esto?”
No me
preocupa que un juicio se vaya al agujero, igual como se van los muertos que la
gente entierra en sus olvidos – El silencio, o el sentido, es personalmente
responsable – Tras volver a delirar y volver a delirar y volver... – El
silencio con sus agujeros negros que en su mayoría guardan un destino que no es
otro que la obscuridad y el deliro más vivo (NovaTenebraVivam) – Déjame
exagerarlo todo, nuevamente, le digo, déjame seguir pensando en voz alta la
historia de los eventos de la vida sobre una palabra eterna; mientras se
adjunta la intimidad con el destino – Tras volver a callar, y volver a callar y
volver... – ¿Qué voy a hacer si la dejo?, me pregunta, si quizá las nuevas
horas fuera de este sistema sean el nuevo “Aleluya” (NovaTempusSacra) – No me
preocupa la vida debajo de la línea si no es para existir por encima; dónde flota
una basura en una costa de mugre sobre el océano inmenso y nos encontramos de
repente con algo que reluce junto a nosotros –Tras volver a confesar y volver a
confesar y volver… –Si para cuando esté contento no se van a acercar ni los
fantasmas que viven en mi cabeza y que cada NovaTenebra se juntan para
explicarme la vida, o el sentido de la misma con las mismas palabras – Todo lo
que agobia se acomoda en silencio – No me preocupa ser parte de un nuevo
silencio que me devuelva el caos para crear y destruir mientras combate contra
lo terrible y vacía que puede ser la realidad en su forma más pura – Nada de
esto es literatura, sino más bien pensamiento y todo eso temporal (El mundo, el
arte, el amor, tu… yo) – Siempre será un pretexto para llegar a una forma
llamativa de evocar tu rostro, el delirio, la intimidad y los tiempos, por su
puesto bajó un hábito de encuentro singular – Tras volver a romper y volver a
romper y volver… – La realidad en su centro alquímico, dónde la belleza se
purifica en su estado más crudo (NovaNativisRudis) – No me preocupa el sentido
salvo que valga la pena deconstruirlo y guardarlo ahora en cajas dónde los
objetos guardan un valor alegórico que entiendo como motivos – No por mucho
arrepentirme seré inocente más temprano (NovaMeaCulpa) – Con la cara enmarcada
en un sueño que observo a través de un cristal fino y la angustia teniendo
ganas de salir de las paredes, mientras la vida se cuelga del futuro en forma
de suspiros, con su posición subvaluada en cada esquina con color a alumbrado
público – El silencio es personalmente responsable – Recuerdas cuando te dije
que siempre iba buscando a una mujer como tú – Y debajo de la línea se esconde el
nombre de la realidad – Recuerdas que también te decía que todo era como un
pacto, un acuerdo entre las personas y las historias que se escriben
(NovaTempusNarratur) y que en algún momento adjuntan en mismo equipaje la
intimidad: la tuya, la mía, la que el universo encierra – El universo que es
universalmente responsable y se genera literalmente entre el caos y la
obscuridad; lo mismo que las personas – Y en el borde de la mesa me reconozco: “Entonces, esto es permanencia... Esto”
Y ahora ¿qué?
